ISLAS GALAPAGOS
Las islas Galápagos (también islas de los Galápagos y
oficialmente archipiélago de Galápagos) constituyen un archipiélago del océano Pacífico ubicado a 1000 km de la
costa de Ecuador.
Está conformado por 13 islas grandes con una superficie mayor a 10 km²,
5 islas medianas con una superficie de 1 km² a 10 km² y otros 215 islotes de
tamaño pequeño además de promontorios rocosos de pocos metros cuadrados
distribuidas alrededor de la línea del ecuador terrestre.
Administrativamente, Galápagos constituye una provincia de
Ecuador, conformada por tres Cantones, que a su vez son islas, las
cuales son San Cristóbal, Santa Cruz e Isabela.
El 12 de febrero de 1832, bajo la presidencia de Juan José Flores, las islas Galápagos fueron anexadas a
Ecuador. Desde el 18 de febrero de 1973
constituyen una provincia de este país.
Se estima que la formación de la primera isla tuvo lugar hace más de 5
millones de años[1]
, como resultado de la actividad tectónica. Las islas más recientes,
llamadas Isabela y Fernandina, están todavía en proceso de formación,
habiéndose registrado la erupción volcánica más reciente en 2009.
FLORA
Las plantas son la base de toda la vida dentro de las Islas Galápagos.
Con alrededor de 560 especies nativas de plantas - las plantas que
llegaron a las islas por medios naturales - en las islas de las cuales
aproximadamente una tercera parte de la flora de Galápagos son
endémicases, es tan extraordinario como su fauna. Muchas especies son
tan diferentes de otras que se agrupan en sus propios géneros endémicos.
Estos incluyen Scalesia, el endémico "árbol de margarita ', que ha
evolucionado en una gran cantidad de especies diferentes en un directo
paralelo botánico de los pinzones de Darwin. Estas plantas combinadas
con las 200 especies de plantas introducidas y 500 especies de musgos,
líquenes y hepáticas forman un ecosistema complejo que se puede dividir
en zonas de vegetación específica:
FAUNA
Las características de su fauna y flora convierten a las Islas Galápagos en un territorio único en el mundo. La naturaleza extraordinaria de las islas ha impresionado a naturalistas, científicos diversos y visitantes. En 1930 empieza la preocupación de las autoridades del Ecuador y de los científicos del mundo para evitar que se destruya este museo natural. En 1936 se declaran zonas de reserva de flora y fauna a 14 islas del archipiélago.
El gran interés científico y turístico a nivel mundial por este archipiélago ha sido originado, en gran parte, por la facilidad para observar diferentes especies de una fauna variada que incluye a la tortuga gigante, su promedio de vida es 150 años, de la cual persisten 11 de las 14 subespecies originales.